lunes, 18 de marzo de 2013

FINAL ALTERNATIVO PARA "EL INCIDENTE DEL PUENTE DEL BÚHO", DE AMBROSE BIERCE



Despertó sobre un colchón de paja. Su endeble mirada recorrió el lugar, era un  granero. Respiraba con dificultad, sentía un rulemán atorado en la garganta. La fiebre había bajado, pero un dolor dantesco en su nuca mantenía el interior de su cabeza convulsionado, como una olla tapada llena de agua en ebullición.  La puerta se abrió, una mujer entró con un trozo de pan en la mano.

-          El almuerzo.

-          ¿Dónde estoy?

-           Lo escondo de la policía, me dio lástima.

-          Recuerdo estar a punto de ser ejecutado sobre el Puente del Búho. Caí al agua, nadé hostigado por los fusiles de los cerdos del ejército de la Unión, eludí los cañonazos, me interné en el bosque…

La mujer interrumpió el relato.

-          Señor, la guerra de secesión terminó hace cuarenta años.

El viejo Peyton desconcertado permaneció en silencio.

-          ¿Recuerda haber corrido hacia mí con los ojos desorbitados y tratar de abrazarme?

No hubo respuesta.

-          Jacob, el mecánico, trataba de protegerme, lo golpeó con una llave inglesa y usted se desmayó. Él lo venía siguiendo, dijo haberlo visto rato antes en su taller, “buscando explosivos para volar un puesto de vigilancia”, y comiéndose un rulemán.

domingo, 10 de marzo de 2013

UN GRACIOSO

SANTIAGO desplomado sobre una silla giratoria y reclinable, con base de metal, tapizada en ECO cuero. Viste traje beige. Fuma y tira la ceniza al suelo.

Golpean a la puerta.

Santiago: ¡Pasá!

Gira el pestillo, la puerta se abre, detrás aparece RÓMULO, viste pantalones vaqueros, camisa celeste, lleva el pelo engominado hacia atrás, mide 1,40.

Rómulo: ¿Cómo andás Santiaguito? ¿Qué pasó?
S: ¡Rómulo, querido! ¡Pasa, por favor, sentate!

Rómulo entra a la oficina cerrando la puerta tras de sí. Se sienta frente a Santiago, al otro lado del escritorio,  en una silla con base de metal, tapizada en ECO cuero, pero que no gira ni se reclina. Sus piernas quedan colgando en el aire.

R: Lindo traje
S: ¿Te gusta? Me lo regaló mi ex esposa. ¿Tomás algo?
R: ¿Qué tenés?
S: De todo, pero ando con ganas de tomar whisky ¿Me acompañás?
R: Bueno, dale, pero no me sirvas mucho que de acá me voy al cumpleaños de mi sobrina.
S: Lo que no tengo es hielo...
R: Ah, esperame un segundo.

De un saltito Rómulo baja de su silla, sale de la habitación. Pocos segundos después reaparece arrastrando una conservadora para camping.

S: ¿Y eso?
R: Para el cumpleaños de mi sobrina, mi hermano me pidió si podía llevar unas bebidas. Compré unas bolsas de hielo para que se mantengan frías.
S: ¿Cómo hiciste para subir la escalera con eso?
R: Soy capaz de levantar cincuenta veces mi propio peso...

Rómulo abre la tapa de la conservadora, corta con un dedo el nylon de la bolsa de hielo, toma un cubo con cada mano.

R: ¡Dame los vasos que me congelo!

Santiago se estira y toma dos vasos old fashioned de la repisa de atrás de su escritorio, los apoya en la mesa contra la cornisa contraria, del lado más cercano a su interlocutor. Rómulo, parado en puntas de pie, coloca un hielo en cada vaso. De la misma repisa, Santiago toma un whisky doble etiqueta negra, lo abre, sirve a Rómulo, luego a sí mismo.

S: Brindemos
R: Esperá un segundo, le voy a poner un poco de Coca porque el whisky solo a veces me hace doler la cabeza

Rómulo saca una botella de de Coca Cola de la conservadora, la apoya en la mesa, retorna a su silla.

R: ¿Me servís que hasta allá no llego bien? Por las dudas que haga cagada...

Santiago afirma con un cansino movimiento de cuello, estira el tronco hacia delante sin despegar su culo del asiento, toma el refresco y sirve un chorro largo en el vaso de Rómulo.

R: ¡Gracias! Bueno, ¿por qué querías brindar?
S: Por todos estos años en los que hemos trabajado juntos
R: ¡Brindemos por eso!

Chocan los vasos en el aire, campanean los cristales.

R: Bueno, contame, ¿para qué me llamaste? ¿Surgió algún casting?
S: No...
R: Ah...
S: ...

R: Te veo raro, ¿pasa algo?
S: Si... Pasa que si querés seguir trabajando como actor vas a tener que cambiar el tipo de rol que venís haciendo...
R: No entiendo
S: Tenés que dejar la comedia, cambiar de género, tirarte más para el lado del drama, probar con un thriller, mandarte una snuff movie, no sé, lo que más te guste, pero la comedia no va más.
R: Sigo sin entender, ¿por qué se supone que tengo que dejar de hacer comedia?
S: Mirá, hace más de un año que vengo recibiendo cartas y llamados de organizaciones de padres y familiares de niños con acondroplasia, todas quejas, reproches y amenazas de denuncia... Dicen que "mofarse de una persona que sufre una enfermedad congénita es uno de los típicos casos de conducta medieval, que perduran en nuestra sociedad actual, y que debemos esforzarnos por erradicar". Elevaron una queja al Comité de Integración Social y Derechos Humanos... Ayer me llegó una carta intimándome, como tu representante, a no aceptar más roles para vos en el género humorístico.
R: ¿Qué? ¡Pero yo soy humorista!
S: Fue lo que les dije...
R: ¡Además nunca me auto denigro para hacer reír a la gente!
S: Fue lo que les dije...
R: ¿Y qué rol se supone que tengo hacer? ¿Además del amigo negro ahora van a meter al amigo enano? ¿O  voy a actuar en una película que muestre la difícil vida de un enano? Yo tengo familia, hijos, llevo una vida perfectamente normal, hago lo que me gusta... ¿Por qué tienen que decidir ellos que rol puedo o no interpretar?
S: Fue lo que les dije...
R: ¡La gente no se ríe de mí porque soy enano, hago reír porque soy buen comediante!
S: Fue lo que les dije...

Permanecen unos segundos en silencio. Rómulo estalla en llanto. Santiago bebe su whisky de un sorbo, mira al suelo avergonzado.

"¡CORTE!" grita el DIRECTOR fuera de escena.

Director: ¡Perfecto muchachos! Especialmente vos Martín (nombre del actor que interpretó a Rómulo) ¡Te felicito! Cuando dijiste "no me denigro a mi mismo para hacer reír a la gente", acá atrás tuvimos que aguantar la respiración para no cagarnos de risa. ¡Mirá que son graciosos ustedes los enanos!

sábado, 9 de marzo de 2013

ADIVINA QUIÉN?


Sr. O- ¿Es pelado?
Sr. M- Si...
Sr. O- ¿Tiene lentes?
Sr. M- Si...
Sr. O- ¿Y polera?
Sr. M- Si...
Sr. O- ¿Es Foucault?
Sr. M- Si, ganaste. ¿Jugamos a otra cosa?
Sr. O- Dale, a mi también me aburrió el "Adivina quién? Versión filósofos del s. XX"

SOBRE MOSCAS Y SECUOYAS


Julio: ¿Sabías que una mosca vive entre 10 y 14 días?

Juliana: Pobres...

Julio: Las que viven más nunca pasan el mes...

Juliana: Fa...

Julio: No tienen tiempo para perder, cualquier momento es importante en la vida de una mosca.

Existen un montón de basureros, soretes, perros y gatos muertos, baños de bares, carritos de chorizos y un montón de lugares más que una mosca debería visitar antes de morir.

Si una mosca se enamora tiene que decirlo enseguida, tiene que gritarlo, no puede quedarse en su casa boludeando, desojando una flor o escribiendo en un diario. Tiene que ir y encarar, no le queda otra, si se duerme se le pasa la vida como pelotazo frente a la jeta y su amor se va en el tren, y ya no lo ve más, o si lo ve seguro será tarde porque otra mosca con más huevo fue y le dijo lo que sentía...

Y no sólo en el amor, en todo, la mosca tiene que ser decidida, pierda o gane, no puede titubear, tiene que arriesgarse.

Lo bueno es que si le va mal solo sufrirá 15 días.
Lo malo es que si le va bien solo disfrutará 15 días.

Juliana: ¿Alguna vez viste una secuoya?

Julio: ¿Qué es eso?

Juliana: Un árbol que vive 1500 años...

Julio: Fa...

Juliana: Si una secuoya hablara con otra secueya de nuestras vidas, sonaría parecido a como hablás vos de la vida de las moscas.

APUESTA EN LAS CATACUMBAS


(A)- Si es veloz como un perro, no puede ser jamás un gallo, que dicho sea de paso, son mucho más lentos en carrera que un perro, sea cual sea la raza.

(B)- ¿La raza del perro o la del gallo?

(A)- Da igual.

(B)- ¿Y qué me decís de las alas?

(A)- Las alas lo ayudan al gallo, es verdad, pero solo en el pique corto, en una distancia mayor a dos metros, no existe perro que pierda con un gallo. Además el gallo es más de correr en zigzag, cosa que el perro no, el perro camina y corre derecho.

(B)- ¿Y si el perro no quiere correr?

(A)- ¿Y si el gallo no quiere correr?

(B)- No te pongas especulativo.

(A)- Vos fuiste el primero en ponerse especulativo.

(B)- Terminemos de una vez por todas con esto, largá al perro, yo largo al gallo, todo a la cuenta de tres.

(A)- Uno, dos, tres.

(B)- ...

(A)- Parece que es un empate...

(B)- Si...

(A)- Deberíamos empezar a apostar con animales vivos...

(B)- Si...

A LAS TRES DE LA MAÑANA


- Nada, es viernes , tres de la mañana, estoy solo en casa, ningún amigo responde el teléfono, la noche está divina, llena de estrellas, me puse a tomar fernet con coca y bueno, nada, estaba aburrido y justo me llamaste…

- No te llamé, me llamaste vos a mí

- Bueno, es lo mismo…

- ¿Lo qué es lo mismo?

- Que me hayas llamado vos o que te haya llamado yo

- No es lo mismo

- 2 más 2

- ¿Qué?

- ¡2 más 2! ¿Cuánto da?

- Estás borracho

- ¡Cuánto da 2 más 2!

- ¿A qué querés llegar?

- ¡¿Cuánto da 2 más 2?!

- 4

- Bien, ¿y 2 más 2?

- ¡4! ¡4, ya te dije! ¡4!

- ¿Ves?

- ¿Qué?

- El orden de los factores no altera el producto

- ¿Eh?

- Primero te pregunté cuanto era 2 más 2 y depués 2 más 2 y en ambos casos dijiste 4

- ¿A qué viene esta idiotez Pepe?

- A que da igual si fui yo el que te llamó o fuiste vos la que me llamó a mi, lo importante es que cuando pensás en mi pensás en el hombre de tu vida. Lo importante es que estás muy enamorada, que mi indiferencia te hace sufrir y sólo yo puedo ayudarte a salir del pozo. No te voy a mentir, el amor que sentís por mi no es correspondido, eso lo sabés, pero estuve pensando y dado que estás más fuerte que un arado de bueyes (a pesar que no tengas más que pochoclo dulce vencido en la cabeza), no puedo darte mi amor pero si puedo ofrecerte una noche de sexo salvaje y desenfrenado...

- …..

- Bueno, salgamos de eso, ¿venís vos o voy yo para ahí?

- ….

- Hola

- …..

- Hola, ¿me escuchás?

- ………………………………………………………………………………..

- Se le debe haber cortado, voy a volver a llamar...

SOBRE GLOBOS Y ELEFANTES


PABLO y LUCÍA caminan por un parque. Visten ropa de noche, lentes negros los dos.

Pablo: ¿No querés sentarte?
Lucía: Acá no…

(Silencio)

P: Si atás muchos globos llenos de helio a un elefante, ¿podés hacerlo flotar? No digo hacerlo volar demasiado, solo flotar, que se eleven las patas del suelo
L: ¿De cuántos globos estamos hablando?
P: Muchos
L: Capaz…
P: No sé, si se puede seguro que a alguien ya se le ocurrió antes
L: ¿Te parece?
P: Y si…
L: ¿Y para qué va a querer alguien levantar un elefante con globos de helio?
P: Podría ser una buena publicidad para una marca de globos
L: No existen marcas de globos
P: Claro que existen
L: Nombrame una
P: No sé Lucía, pero alguna debe haber, los globos existen, alguien los tiene que fabricar

L: ¿Tenés sueño?
P: No
L: Yo tampoco

P: ¿Te quedan cigarros?
L: El último.
P: ¿Fumamos a medias?
L: Fumalo vos
P: Fumamos a medias
L: Fumalo vos

Lucía saca su último cigarro y convida a Pablo. Este lo enciende, fuma una pitada.

P: Helio y globos…
L: ¿Qué?
P: ¿Dónde se pueden conseguir a esta hora?
L: Ni idea, pero seguro que un elefante no vas a encontrar en ningún lado
P: No es para el elefante
L: ¿Y entonces para qué los querés?
P: Para nosotros, para irnos a casa volando
L: Pablo, ya estamos volando, en un zeppellin, en pleno viaje lisérgico...

GILDA Y LA TARTA DE ATÚN


LOURDES espera el ómnibus sentada, viste ropa de calle, carga con termo, mate, un morral sobre su falda. Llega DIEGO, viste ropa de calle, carga una abultada mochila negra. Se saludan.

Diego: ¿Todo en orden?
Lourdes: Bien por suerte
D: ¿Funciona ese mate?
L: No lo empecé, ¿querés el primero?
D: Dale, hago el sacrificio...

Diego toma un mate, se quita la mochila, se sienta junto a Lourdes.

D: ¿Lloverá?
L: Dicen que si...

D: ¿Hace mucho que estás?
L: Cinco minutos...

Lourdes frunce la nariz.

L: ¿Y ese olor?
D: Ah, soy yo, comí tarta de atún y el mate me hace repetir
L: ¿Tarta de atún a las siete de la mañana?
D: Quedó de ayer y no había nada para desayunar...
L: La próxima largá para el otro lado
D: Largué para el otro lado, lo que pasa es que el viento va para ahí
L: ¿Vas a seguir tomando mate?
D: Si
L: Entonces cambiemos de lugar

Se ponen de pie, intercambian lugares. Lourdes ceba un mate, lo toma.

D: ¿Vos qué desayunaste?
L: Ravioles con tuco de pollo
D: Dale boluda...
L: Pan con manteca y azúcar
D: Mirá que bien...

Una nave espacial aterriza frente a ellos.

L: ¿Estás viendo lo mismo que yo?
D: Si, si, esa nave aterrizó y aplastó un escarabajo de esos de cuerno grande ¡Qué mala liga!
L: Pobre bicho, lo venía siguiendo hace rato, estaba pensando en agarrarlo y subirlo a la vereda, era obvio que lo iban a pisar...

Se abre una de las compuertas de la nave, de ella se despliega una escalera de aluminio cromada. Una figura femenina se abre paso entre la penumbra del interior del vehículo, asoma a la luz, desciende dos escalones, es GILDA, lleva un collar de flores y un casco rosado bajo el brazo izquierdo. Dirige su mirada a los jóvenes.

Gilda: Disculpen gurises, ¿la Facultad de Ciencias Políticas?
D: Ah justo vamos para ahí, en platillo volador está como a veinte minutos de acá, ¿nos llevás y te voy indicando?
G: ¡Dale buenísimo!

Diego se pone de pie, calza al hombro su mochila. Lourdes permanece inmóvil.

D: ¿Qué hacés?
L: Me voy a quedar un rato, quiero llorar al escarabajo...
D: Bueno, ¿me puedo llevar el mate y te lo devuelvo en la facultad?
L: Dale

Diego sube las escaleras, saluda a Gilda con un beso, se presenta.

D: Diego, mucho gusto.
G: Yo soy Gilda...

Gilda frunce la nariz.

G: ¿Y ese olor?
D: Ah, soy yo, es que desayuné tarta de atún y el mate me hace repetir...

BIGOTE


CARLOS y ANASTASIA sentados a la mesa, desayunan, visten ropa de cama.

Carlos- Estoy pensando en dejarme el bigote

Anastasia- ¿Seguro?

C- Si... Va, no sé, ¡estoy pensando no te digo!

A- Mirá que no cualquiera resiste la presión social de andar por la vida con bigote...

C- ¿A qué te referís?

A - Te van a mirar más en los ómnibus, en la calle, la gente va a colocar muchas expectativas en vos, van a esperar que seas músico, pintor, actor, un gran pensador, escritor, malabarista, algo, un tipo interesante que usa bigote porque tiene un talento que lo respalda. Sino tenés un talento que respalde tu bigote la gente no va a entender por qué usas bigote.
No estoy descubriendo la pólvora si te digo que cuando la gente no entiende algo se altera, aunque sea de forma inconsciente, y como mecanismo de autodefensa reacciona con hostilidad hacia aquello que no comprende, en este caso vos y tu bigote sin respaldo...
No sé, vos ves, pero un bigote no es para cualquiera...

C- Tenés razón, me voy a anotar en Bellas Artes, después me dejo el bigote...

LA FAMA

MATÍAS y RODRIGO sentados en el banco de una plaza, débilmente alumbrados por la resaca lumínica de un farol eremita, beben vino Merlot envasado en pack Tetra-Brik.

Rodrigo: "Tranquilo, armónico, flexible, brillante. Caracterizado por su suavidad y finura, su empireumático aroma a cacao y setas, distinguido por sus capas de sabor a ciruelas y cerezos. El vino  fino de mesa Merlot varietal Bodegas del Sur, es el logro del incansable, dedicado y pasional esfuerzo de los más capacitados enólogos del país, la selección de las mejores uvas, y el fruto de una larga tradición en vinicultura. Bodegas del sur, más de cien años compartiendo su mesa." 

Matías: Lo que yo no entiendo es por qué, siendo tan bueno, viene en Tetra-Pack y sale cincuenta pesos...

R: ¿Qué hora es?
M: Se me quedó el celular sin batería
R: El mío también
M: Deben ser casi las tres...
R: ¿Cómo sabés?
M: Por la posición de la luna
R: ¿En serio?
M: No, hace un rato, antes que se me apagara, me fijé la hora y eran tres menos cuarto
R: Entonces capaz que ya son las tres
M: Capaz...

M: ¿Oíste hablar alguna vez de Lía Crucet?
R: ¿Quién?
M: La Tetamantis, la que cantaba "Me sube el colesterol"
R: ¿Qué pasó?
M: No sé, nada, nunca más escuché hablar de ella...
R: Ni idea...
M: Espero que ande bien
R: ...

M: La fama es un fantasma, el éxito también ¿Te das cuenta? Lo tenés todo, te crees invencible y cuando querés acordar te hacés viejo, ya no hay aplausos, no sigue siendo tan fácil hacer amigos nuevos todos los días, y llega un punto en que la gente te ve y ni te reconoce...
R: ¿Sabías que Larry murió en un asilo?
M: ¿En serio?
R: Con hemiplejia...
M: ¿Y Curly y Moe?
R: Ni idea...
M: Ojalá nunca seamos famosos...
R: Ojalá... Pero si algún día lo somos, quedemos en algo: muramos en pleno éxito, así no llegaremos a ser lo suficientemente viejos como para darnos cuenta que todo fue una farsa...
M: Pará, ¿dijiste muramos? ¿No es mueramos?
R: No, se dice muramos.
M: ¿Seguro?
R: Si

Matías se pone de pie.

M: Me voy a fijar en la página de la RAE. 
R: ¿Ahora?
M: Si ¿Te dejo el vino?
R: Dale, me quedo un rato más, a ver si me resfrío y mañana falto a trabajar...